Esta vez debiera ser salvajes, en plural, aunque como ellos se saltan las reglas gramaticales del español -pobrecillos, no les han enseñado más en la escuela- pues yo me voy a saltar alguna también. El mes pasado era un ejemplo de salvaje, concretamente vasco, y este mes parece que toca ejemplo catalán, al menos de momento.

Según leo en Periodista Digital, nacionalistas catalanes cuelgan en una web una foto de Rosa Díez con un tiro en la frente. Lo han hecho en un foro de una web llamada Racó Catalá, cuyo significado del nombre desconozco porque soy un desgraciado español que no sé catalán, y cuya dirección no voy a poner -en la noticia de PD la enlazan- para no hacerles demasiada publicidad, que es justo lo que buscan estos salvajes, también denominables paletos, puesto que parecen muy faltos de trato social. Se ve que sólo saben tratar con su burro catalán y así les va.

¿Qué clase de gente hace estas cosas? Rosa Díez nunca ha sido santa de mi devoción, pero admiro mucho el que se saliera del PSOE porque no compartía muchas ideas con el partido, sobre todo las relacionadas con el País Vasco, para irse a un partido pequeño en comparación con el propio PSOE. En sentido contrario el cambio habría parecido pues como cuando el camarada López Garrido se fue al PSOE, cambiarse la chaqueta para irse a un partido más grande, más fuerte, pero ella se ha ido del grande al pequeño.

Al igual muchas veces cualquiera podemos desear cosas malas para quien sea, pero queda en eso, un pensamiento que enseguida corregimos con el sentido común y sobre todo con el amor a la vida y a la libertad de cada cual. Lo que pasa que los catalanistas que han hecho ese montaje tienen confundidos los conceptos y desequilibrados los valores. Cada cual tiene libertad para expresar sus ideas, pero ir haciendo amagos de amenaza a personas no es libertad, porque eso va justo en contra de la libertad.

Supongo que ahora, en la jerga que estos salvajes entienden, Rosa Díez tendría que hacer montajes de naZionalistas catalanes en las pasadas hogueras de San Juan, de Montilla sosteniendo en sus manos un título de Bachiller, de José Luis Pérez Díez alias Josep Lluis Carod Rovira llenándose de esporas al estar a menos de 100 metros de una bandera española,.. Y aún así muchos serían descafeinados en comparación con el que han hecho estos… zombis (2ª definición).

Desde luego que mientras que sigan reclamando lo que pretendan con esas formas tan peculiares, no van a dejar de hacer que aumente el descontento de muchos españoles, y ya no hacia ellos en concreto, sino hacia toda su región.