A cuento de la fama de estos días pasados que ha obtenido el hombre que aparece al fondo del dedazo de Mourinho a Tito Vilanova, Francesc Satorra alias el tío del bigote, el observador o the observer —porque ha cogido fama internacional— me he acordado del linimento de Sloan.
Y es que si a mi abuela o incluso a mis padres les hablo del tío del bigote pensarán en un preparado de los tiempos de María Castaña que se utilizaba para aliviar los dolores. Algo a lo que hoy podría ser por ejemplo el archiconocido Reflex. Todavía hay quien conserva un frasco de este linimento a buen recaudo a modo de coleccionista o por si las moscas, como quien guarda Floïd del de antes en tapón de corcho.
Los motes como las modas también se repiten.
Mi madre también guarda un frasco del matadolores jajaja es muy decorativo, ¡sin duda!