Las infraestructuras de ADIF y la página web de RENFE dejan que desear, pero por suerte siempre habrá lugar para la parte humana y su buen saber hacer, como ejemplo de ello ha sido para mi lo que me aconteció hace tan solo unos días con un par de billetes de tren como objetos principales.
Los viajeros solemos tener la costumbre de tener a mano el billete a la vez que a buen recaudo por razones obvias. Sin embargo siempre hay una excepción y la mía tuvo lugar el pasado miércoles. En la estación de origen no se nos requirió el billete como viene siendo habitual, por lo que nada más sentarme en el asiento decidí tenerlo bien al alcance, junto con el de vuelta por eso de tenerlo todo junto, confiando en que en breve el típico revisor me lo solicitara con el famoso humor que caracteriza a este gremio. Concretamente cometí el error de colocar tales billetes […] (continuar leyendo)