Como a tantos nos recuerda esa famosa canción de Malvariche, estos días festivos que vienen son los propiamente dichos de las Fiestas de Santa Eulalia, en Totana. Me dijeron que este año no iba a haber carpa de noche y que habrá que conformarse con la feria de día, que para que vamos a engañarnos, es bastante mejor que la de por la noche en cuya carpa caían chorretones por la condensación y algún comunista redimido de pañuelo tipo palestino al cuello me dió el tostón sobre la política del alcalde de allí, aunque entonces ni Tot Festival ni otros inventos parecidos se supone que habrá. 🙁
Ya veremos a ver lo que depara el finde, entre que ahora a todo quisqui le ha dado por salir a montar en bicicleta esos días y la cita obligada en la feria con los alhameños… Pero la bajada de La Santa el lunes no va a faltar, un acto de lo más típico de Totana, en el que ya la noche antes se empiezan a ver grupos de gente que suben al Santuario, algunos hasta con el carro de la compra directamente y eso que cuesta llevarlo hasta arriba, a pasar la noche y estar listos para al amanecer salir en romería hacia Totana. No estaría mal subir de noche a hacernos unas migas, que con estos fríos van a venir bien.