En estas fechas no puedo evitar acordarme de cuando al comienzo de las asignaturas, mas de un profesor dice que va a ser bueno, comprensivo, que tal que cual… que en resumidas cuentas quieren tratar de ser, palabras literales de algunos «el profesor que nunca tuve». Y claro en ese momento, entre la sonrisilla del profesor y la presunción de incocencia que sueles mostrar ante todo, pues piensas… «mira que bien, un buen profesor y que quiere vernos aprobar a todos 😀 «.
Van pasando las clases, las bromillas, mas sonrisillas, todo genial, muy buen rollo… Vamos que ni piensa en el exámen porque consideras que vas a llegar a él sabiendo ya bastante de la asignatura y que estudiando como es debido el exámen saldrá adelante sin problema. Pero luego llega el día del exámen, ves las preguntas y como el aparente buen rollo del profesor desaparece de golpe de tu mente.
Y es que, por ejemplo, algo que sucede muchísimo en los exámenes que contiene resolución de problemas.
Te encuentras un problema que vale 6 puntos (de todo el exámen), y realizas el primer apartado todo contento, viendolo fácil y asequible para todo lo que has estudiado jeje. Pues así sigues haciendo apartados, a la par que la dificultad va aumentando también, y ya el último lo respondes pero con algunas dudas porque ese está ya puesto para el que quiere ir a por nota. Un caso típico pues que el problema tenga 6 apartados.
Salen las notas y !sorpresa¡ has suspendido, porque la tería (en este caso sería de 4 puntos) no la tienes perfecta porque era de desarrollar y es imposible adivinar cómo quería el profesor que pusieras las comas. Es decir ya vamos bien si, porque el profesor que él nunca tuvo pero quiso tener debería de haber corregido los exámenes al pie de la letra y con estricto nivel jeje. Pero ¿y por qué suspendido si bueno, la teoría ha salido regular y tienes un par de puntos? A ver el problema… vaya, de 6 puntos posibles y me ha puesto 2 y algo. Claro haces las sumas y no llegas al 5, un 4 y algo… bueno iremos a revisión, porque de 6 puntos posibles (quito el último apartado porque no estaba muy seguro) tengo hasta 5 que creo que debiera tener, y entonces estaría más que aprobado jeje.
Así que llega el dia que vas a la revisión, y cuando toca mirar el problema… vaya, resulta que te equivocaste en alguna idiotez del primer apartado, o sea que ya de los 5 que creias posibles del problema te quedan 4 puntos posibles. Pero sigues mirando el resto de apartados, y anda, para el resto de apartados los resultados dependian del obtenido en el primero. Claro, te dicen, es que no se puede premiar por igual al que ha usado datos erróneos que al que los ha usado correctos. Total que en ese momento te acuerdas de cuando eso de «el profesor que nunca tuve», y te dan ganas de preguntar… ¿pero se cree usted que yo sabía que mi resultado del primer apartado era erróneo? Si era muy fácil y lo repasé, pero no cai en que me equivoqué en un signo de la ecuación… Pero te callas por respeto, no se vaya a liar jeje.
Entonces, deciamos que quedaban 4 puntos, vale, (2 y algo + 4 = 6 y algo, aprobado jeje), pero resulta que por haber usado en cada apartado datos erróneos, ya cada apartado pasar a valer la mitad (2 y algo + 4/2 = 4 y algo) porque por supuesto todos todos dependen de manera directa o indirecta del resultado del primer apartado. Así que exámen suspenso, mas suerte para el próximo…
Pues sólo he visto un exámen en el que para cada apartado hayan puesto «suponiendo que en el anterior apartado se ha obtenido que tal es igual a no se cuantos…». ¿Y por qué no hacen eso en otros muchos? ¿Qué pasa que luego compiten a ver quien es mas chulo y mejor profesor porque suspenda a cuantos más mejor? ¿Es que les da verguenza hacer eso? Porque al profesor que sí hace eso en sus exámenes los alumnos lo quieren un montón, porque a pesar de que no regale para nada los aprobados, se ve que él si aneló un buen profesor y buena persona que le hubiera dado cualquier asignatura, y no a un villano y traumatizado como otros cuantos parece que nunca tuvieron pero desearon con fervor. Quizás es que todo esto tenga relación con que reciéntemente dijeron que mi universidad tenía falta de alumnos, y así intentan tener atados a todo los que puedan, y si es pagando matrículas en 3ª pues mucho mejor, que como no suelen ir a prácticas ni a clase pues con ese alumno se obtiene un dinero casi regalado, salvo por el «esfuerzo» luego del profesor de corregirle el exámen 😀
Cada día me cuestiono más si muchos que se dedican a la docencia realmente les gusta eso o es que no tenían ninguna otra cosa con la que poder ganarse el pan. Que total para lo que hacen contribuirían mucho mejor a la sociedad cogiendo patatas 🙂