Limitación de plazas y paro

La opinión que le debo a los numerus clausus y la limitación de plazas no es precisamente positiva. Y en estos tiempos de tanta escasez de trabajo y gente que tiene que emigrar para buscarse las habichuelas me viene al recuerdo un argumento más de los defensores de tal artimañana.

Muchos partidarios de los numerus clausus basan la necesidad de estos en la limitación de plazas de las carreras universitarias. Hasta ahí se puede entender. Alguna manera de selección hay que poner. Pero además los hay que justifican la limitación de plazas con la demanda que las titulaciones tienen en el mercado. Dicho queda correcto y hasta parece eficiente. Sin embargo cuando lo trato de aplicar a algún determinado ejemplo no me salen las cuentas, como derecho y medicina.

La titulación de derecho […] (continuar leyendo)

Visto bueno de la ANECA para Medicina en la UCAM

Ayer se supo que la ANECA le ha dado a la UCAM el visto bueno para impartir Medicina [laverdad.es]. En Murcia, comarca huerta de, faltaría más. Creo que en Los Jerónimos. Y es que aunque la fuente recién citada venda ya cómo que Medicina se va a impartir en la UCAM aún faltan dos aprobaciones más por parte del Consejo Universitario del Ministerio de Educación y el Consejo Interuniversitario de la Comunidad Autónoma de Murcia, respectivamente.

Poco después de la última vez que la ANECA le dio portazo al asunto, cuando la UCAM aún intentaba poner la titulación en La Guía, en Cartagena, empezó a rumorearse que cómo no se intentara en Murcia iban a seguir sin recibir el visto bueno. Parte de estos rumores se fundamentaron […] (continuar leyendo)

La UPCT estudia la desigualdad de género en las titulaciones

No se de qué podrán presumir los alumnos y exalumnos de otras universidades. Con la UPCT, además de algunos buenos descubrimientos en materia agrícola y de telecomunicaciones, podemos presumir de que continúa en su empeño por luchar contra la desigualdad de género en las titulaciones. O al menos recibiendo subvenciones estatales para ello, supongo. El mensaje del año pasado era buscar que se matriculasen más mujeres y ahora hace poco me he enterado de que están haciendo un «ambicioso proyecto» con una investigación para recomendar a orientadores, universidad y empresas cómo reducir la desigualdad de género en el acceso a determinados estudios.

Dice así el texto, que por supuesto no podía empezar con esa machista generalización tan frecuente como correcta […] (continuar leyendo)

La UCAM intentará por enésima vez impartir medicina

Lo publica hoy La Verdad. Será por supuesto si la Facultad de Medicina de la UMU no azuza también a la Comisión Permanente del Consejo de Universidades como ya presumiblemente hizo con la ANECA, en puesto de esmerarse más en educar a la ciudadanía en el uso de la medicina [La Verdad].

Las últimas polémicas a las que se enfrenta parecen estar en el uso de hospitales públicos y la existencia de plazas para sus alumnos. Desconozco si la UCAM le habrá ofrecido un pago a cambio a la Consejería de Sanidad y Consumo, que el sentido común me hace intuir que sí porque el Estado lo somos todos, aunque también es previsible que la UMU le pague a los médicos por dar prácticas en los hospitales y no es algo que se lleve cumpliendo del todo, como algunos alumnos bien han sabido al llegar y encontrarse que el médico se niega a seguir enseñando gratis para la UMU. Como la coincidencia de que tras llevar un montón de años el Rosell reclamando ser nombrado hospital universitario, cosa de veinte años dice la gente, no se le empezó a tener dicha consideración y uso hasta que la UCAM se interesó en él.

En estos tiempos de crisis la Administración no está nada boyante, al dinero no le van a faltar dueños y ya veremos quién gana, pero tendrá que ahorrar todavía más dinero en educación. Yo no me creo ni mejor ni peor que el resto de ingenieros por haber estudiado en una pública. Como en todos lados he tenido profesores excelentes y otros que estaban deseando acabar la clase para irse a sus negocios privados en los que por cierto alguno usaba material de la propia universidad. Pero la UJCE por ejemplo en eso nunca dijo nada.

Que gane el conocimiento y el saber, que aún ninguna universidad española está entre las cien primeras mientras aquí se pelean entre las propias públicas, ya no sólo entre públicas y privadas.

España, 36ª en competitividad internacional y 62ª en facilidad de hacer negocios

Cada día sale una clasificación de una asociación/empresa/organización sobre solvencia, competitividad, riqueza, obesidad,.. éxito sexual, color de los coches y razas de perros. Y hoy por ejemplo me he enterado a través de El Economista e indagando un poco por mi cuenta y riesgo para contrastar las cifras que hay un par de rankings que no nos dejan muy bien. Para variar.

Según publicó el pasado 19 de mayo el Institute of Management Development [en inglés], una de las escuelas de negocios más importantes del mundo dice la Wikipedia, España está en el puesto 36 de las 58 economías más competitivas del planeta [PDF con el ranking]. Vamos que estamos  un poco por debajo de la mitad de esta tabla. Todo sea dicho hemos subido tres posiciones con respecto al año pasado y por debajo quedan economías como la de Portugal, Brasil, Italia y Rusia, pero casi todos nuestros socios europeos están por encima nuestra.

Según el Banco Mundial, concretamente la Corporación Financiera Internacional y su informe anual sobre los países mejor posicionados para realizar negocios publicado hace algo más de tiempo, el llamado Doing Business [PDF con el ranking], España está en el puesto 62 de 183 países en cuanto a «facilidad de hacer negocios». En 2009 estábamos en el puesto 49, en 2008 el 46, en 2007 el 39 y en 2006 el 38, además de que ahora el listado engloba más países que en 2007 —175. Vamos, que hemos ido bajando conforme más ahonda la crisis en el país y estamos a la altura de Mongolia, Kuwait, Kazajistán y Luxemburgo, sin querer faltar a nadie. Pero todo sea dicho, quedan por debajo países como Italia, China, Grecia y Brasil, a pesar de que la mayoría de nuestros socios europeos quedan bastante por encima nuestra. No obstante es curioso el puesto de China —89— para hacer negocios, si ahora casi todo lo que nos rodea lleva puesto el made in China, o será que tienen la sede comercial en Hong Kong.

Estos estudios suele haber que cogerlos con pinzas, pero hacen que parezca anecdótico aquello de que íbamos a superar a Francia, que según el IDM está en el puesto 24 y el Doing Business en el 31. 😆

Mi universidad busca más mujeres

Logo UPCTHoy me he enterado de que la Universidad Politécnica de Cartagena busca que se matriculen más mujeres, según da a entender laverdad.es y su propia nota de prensa. De hecho se ha convocado un concurso para ello con premios en metálico para los tres primeros y exposición en la Casa del Estudiante. El premio es lo de menos, poco con otros gastos que se hacen.

Una cosa es fomentar la igualdad y otra pedir peras al olmo. Desde que el magnificus actual salió electo, en unas elecciones en las que solo hubo su candidatura por cierto, en la universidad existe la gran obsesión de que se matriculen más chicas. Y ya no es de los estudiantes masculinos que por supuesto nos inclinamos por tocar a muchas compañeras por cada uno. Es que cuando se miran los típicos folletos de publicidad de la universidad o incluso la agenda que cada año nos mandan a casa, hay un montón de fotos con chicas, más que de chicos. ¿Para qué? Cuando se han organizado actos en los que han tenido que participar alumnos y alumnas se ha intentado que a ser posible la participación femenina fuera mayor que la masculina. Como si las carreras de aquí fueran Derecho y Medicina. Y no es así, le pese lo que le pese al rector, las carreras técnicas de siempre les han gustado más a los chicos que a las chicas. Y el que esto sea una politécnica es lo que tiene, un capazo de ingenierías y por tanto hombres. Que es algo que también saben las estudiantes de letras motivo por el que cuando son nuestras fiestas acuden más que si fuéramos de letras.

Para mi no es discriminación, y de nada va a ayudar ahora aumentar la publicidad para intentar que se matriculen más chicas. Distinto es por ejemplo si en una sola esquina de la institución se discrimina según el sexo. Eso sí hay que erradicarlo, aunque a mi en revisiones me han dejado suspenso con la misma nota que a algunas a las que han aprobado a cambio de presentar un trabajito. Pero seguir con la campaña de siempre mientras esta institución se ha gastado el dinero público en llenar Antigüones de pantallas de televisión con el objetivo de anunciarnos a los propios alumnos las carreras que podemos estudiar, se han puesto videoconsolas en la llamada Casa del vago Estudiante, se ha permitido que se quede frente al antiguo CIM la puerta cayéndose, se sigue sin dotar de una solución al caos de aparcamiento en el Campus de la Muralla, sigue dejando que algún profesor se lucre privadamente haciendo uso de material público,.. Ya vale de publicidad y más publicidad, que en las ingenierías no van a aumentar las matriculaciones, ni de chicas tampoco, hasta que no pongan en marcha los nuevos planes de estudios, porque poca gente habrá que se quiera meter a algo para que de aquí a poco le digan que se dé prisa que su plan de estudios se quita. Y todo esto con el dinero de los impuestos y de las matrículas, que precisamente tampoco son de las más baratas de las universidades públicas de España.

Imagen → upct.es

El paripé de los «numerus clausus» en la universidad

El asunto de los numeros clausus dicen que es de las maneras más justas para seleccionar quien accede a las titulaciones con límite de plazas. De acuerdo. El que sea muy listo o muy aplicado tendrá unas buenas notas con las que poder entrar a la carrera que le dé la gana —actualmente eso es de un 9 para arriba, ojo—, y el que es tonto o vago tendrá que conformarse con donde sus notas le dejen matricularse. Aunque luego todos conocemos casos de gente con buenas notas que se meten a estudiar algo por la fama que tiene y que acaban dejando, al igual que otra que entra en la última en la carrera pero se le da genial y luego es un buen profesional. De todo hay en todos sitios. Sin embargo hay algunas cosas que no entiendo de esto del acceso a la universidad.

Los redondeos. Te tiras los dos últimos cursos de instituto en algo llamado Bachiller, que antes por cierto era más largo y enseñaban más conocimientos con los que llegabas a la universidad mejor preparado, en los que las notas de cada asignatura te las tienen que redondear a un entero. No valen decimales. Tienes en tal asignatura un 7,5 y según el profesor que sea te lo redondea al entero superior, un 8, o directamente lo trunca y te deja un 7. Y así en otro montón de asignaturas, a lo largo de esos dos cursos años, para que luego se acuerden de la exactitud y los decimales cuando acabes el instituto y se pongan a calcular la media de todas las asignaturas. Esto choca con selectividad donde a la nota de cada examen se le respetan sus decimales. Si en el instituto has tenido profesores tipo buena persona tendrás una mejor media que si te han tocado unos cuantos amargados que se creen que van a espabilar a la sociedad por redondear las notas al entero inferior. La exactitud en las notas debiera respetarse desde primero de bachiller, por eso de que todos seamos iguales y patatín patatán.

Las repescas. Las hay, y es lógico puesto que como no sabes a ciencia cierta en donde te van a admitir pues pruebas varias carreras y/o varias universidades, así que si quedan huecos libres se mira de la lista de espera que haya. Ahora bien. Están las repescas cuyas fechas se anuncian con buena antelación y se publican en varios lugares, y la repesca última que según la decencia de la secretaría de la escuela o facultad se anuncia sólo en el tablón de la puerta y de un día para otro. ¿Y qué pasa entonces? Que de esa última repesca que sale casi en petit comité se enteran cuatro gatos, y cuantos menos gatos haya además de yo pues más probabilidades tendré yo. Esto es ni más ni menos que el asunto de cubrir las plazas reservadas para discapacitados, deportistas de élite, extranjeros,.. y demás que puedan quedar desiertas […] (continuar leyendo)