Por medio de elEconomista.es me he enterado de que «el Gobierno perdona a los cineastas el pago del canon digital», que muestran la clausula del contrato con egeda que evade a una productora de pagarlo.
Nunca me había parado a pensar si las productoras de cine pagarían o no el canon digital, pero manda huevos la cosa, como diría cierto paisano ex-ministro. Es decir que los despachos de arquitectos e ingenieros para la realización de sus proyectos y almacenamiento de los mismos, los despachos de abogados para elaborar y almacenar sus escritos, las consultas de médicos que almacenan resultados —incluyendo vídeos— de pruebas, los juzgados con las grabaciones en vídeo que hacen de los juicios, los estudios de fotografía y un interminable etcétera, hasta mi proyecto fin de carrera del que me obligan a tener que entregar para la biblioteca de la universidad dos CDs… A nadie nos va a venir la SGAE ni los titiriteros ni demás parásitos del cine cutre que tenemos en España a defendernos si alguien nos ha plagiado nuestras obras, pero no importa, porque a ellos si no les funciona el negocio piden ayudas a cambio de pelotear a los políticos y listo.
Esta gente debe ser la envidia de los cada vez más miles de parados en España.