Hoy hace treinta años que en la avioneta en la que sobrevolaban en Alaska una carrera de trineos con perros Félix Rodríguez de la Fuente, su ayudante Alberto Mariano Huéscar, el cámara de RTVE Teodoro Roa y el piloto Warren Dobson, tuvo un accidente que les costó la vida. Yo no había nacido por aquel entonces, pero recuerdo cómo fui creciendo viendo sus documentales en La 2, y por lo que me han contado en mi familia, fue un personaje muy querido por todos. Hay hasta quien tiene libros de él y yo un día espero lograr hacerme con el de El Arte de la Cetrería, que en Cartagena la archiconocida librería Escarabajal de tanto bombo y platillo no ha sabido ni dedicarme un tiempo a buscarlo. Menos mal que existe Diego Marín no muy lejos.
Lo he etiquetado en cetrería, pero también recuerdo de mi niñez y de un presente cercano haber visto documentales de él sobre otras aves, mamíferos y reptiles, y no sólo por nuestra España, también por África, Sudamérica y Norteamérica, donde cesó su vida. Aunque sin duda Fauna Ibérica fue mi favorita.
Me acuerdo de que empecé a coleccionar unas entregas de un libro más cinta de vídeo VHS. Típica colección que empezaba siendo barata pero que luego comenzaba a ponerse cara de más con nuestra perdida peseta. Me quedé en el tomo seis, donde mis padres me dijeron que ya estaba bien de darle dinero a SALVAT. Años más tarde seguí descubriendo nuevos episodios a través de algún documental suelto de TVE, alguna cadena autonómica o cintas de vídeo que guardaba algún familiar grabadas directamente de la tele, hasta que con la llegada de Internet pude dar con otros cuantos. El Valle de las Águilas, El Águila Real, Operación Zorro, El Proyectil Viviente, El Hosquillo —que luego visité—, Los Señores del Bosque, El Juego de la Caza, El Buitre Sabio, Las Rapaces Nocturnas y por supuesto El Lobo. Y muchos más títulos entre los que cada cual tiene sus preferencias. Varios de ellos los ha ido emitiendo TVE a cuento del aniversario de su fallecimiento y poniéndolos en su web. Programas ejemplares que los niños de hoy día tendrían que ver en puesto de tanta telebasura y dibujos horrorosos que sólo enseñan idioteces, que cuando RTVE borre siempre quedará YouTube con algunas escenas impresionantes como estas: […] (continuar leyendo)